La activista que lucha para eliminar la cultura de la violación en las instituciones educativas

«Había una cultura de la violación establecida, donde la violencia sexual era algo normal que se barría bajo la alfombra. Sentí que tenía que hacer algo al respecto», dice la activista Soma Sara. Ese algo es Everyone’s Invited. Fundada en 2020 por la entonces joven de 22 años, esta plataforma en línea se creó como un espacio seguro donde los jóvenes, que aún asisten a la escuela o la universidad, pueden compartir sus experiencias de forma anónima. «Todo surgió a raíz de las conversaciones que tenía con amigos durante el confinamiento», explica Sara, «ahí nos dimos cuenta de cuántos de nosotros habíamos sido víctimas de acoso, abuso y violencia».

Más y más relatos de violencia sexual dentro de los establecimientos educativos del Reino Unido salieron a la luz y pronto la plataforma se volvió viral. Universidades muy respetadas como Warwick y Exeter fueron algunas de las que recibieron testimonios en su contra, lo que atrajo la atención de los medios de comunicación británicos. Sin duda, su trabajo suscita conversaciones incómodas pero importantes. Se ha expresado la preocupación de que el sitio podría implicar injustamente a chicos específicos sin derecho a réplica y que las instituciones pueden ser señaladas sin los medios para investigar denuncias anónimas. Incluso se sugirió que el sitio puede afectar negativamente las comunicaciones entre chicos y chicas, y que algunos chicos temen que sus interacciones con las chicas puedan ser estigmatizadas como depredadoras sin saberlo. Sin embargo, Sara sostiene que «hay que sentir empatía por ambas partes y comprender las experiencias de las diferentes personas». Ella cree que para que ocurran cambios reales, este entendimiento debe incluir a todos, pero a veces este mensaje se pierde en el camino. El objetivo de Everyone’s Invited, explica, no es provocar una guerra entre géneros. «Realmente quería interrogar y tratar de resolver esta cultura analizando las causas subyacentes, con el deseo de encontrar algunas soluciones en el proceso». 

Dos años después, Sara «necesitaba continuar con este trabajo». Por eso, a principios de este otoño, la recién graduada y activista lanzó su primer libro, Everyone’s Invited. Los ensayos de Sara tocan temas que van desde la masculinidad tóxica y los estándares de belleza femenina, hasta los problemas que aquejan a la industria del porno y la ingenuidad de los padres. Su análisis detallado de la estructura patriarcal no deja piedra sin remover ya que, para ella, esta ha creado una «cultura de la violación» entre los jóvenes, una expresión que se refiere específicamente a las formas despectivas en que los chicos hablan de las chicas; referirse a ellas como objetos, tildarlas de prostitutas y hacer bromas casuales que constituyen acoso sexual. 

El tema de la cultura de la violación siempre iba a ser controvertido y Sara reconoce los enormes desafíos que conlleva ser una de las caras principales del movimiento. «Es psicológicamente agotador hacer este tipo de trabajo; puede ser increíblemente extenuante y emotivo. Además, cuando te atacan, las ofensas que recibes son extremadamente personales, la mayoría de las veces provenientes de las madres de los chicos. Puede ser difícil ya que te sientes muy expuesto». 

Documentales como The Hunting Ground de 2015 —una exposición de los crímenes de agresión sexual ocurridos en los campus universitarios de Estados Unidos y los encubrimientos realizados por las universidades— muestran explícitamente que esto no solo es un problema que sucede en el Reino Unido. Podría decirse que la disponibilidad de la pornografía, la influencia de figuras hipermisóginas como Andrew Tate y la política de no intervención adoptada hacia el currículo de educación sexual contribuyen al desarrollo de una cultura que promueve la violencia en la intimidad. Por eso, en 2022 Everyone’s Invited lanzó un programa educativo para ayudar a las instituciones a abordar la cultura de la violación. Desde capacitación del personal hasta talleres sobre cómo convertirse en un defensor activo, Soma Sara y su equipo se dedican a crear un mundo en el que, idealmente, no se necesiten plataformas como Everyone’s Invited.

Pia Brynteson es asistente editorial en Service95.