Iranian Diaspora Collective: la organización que amplifica las historias de los iraníes
«Sé nuestra voz». Estas tres palabras han sido un reclamo contundente del pueblo iraní. Las pronuncian con la esperanza de que las personas de todo el mundo den testimonio de su lucha por la libertad y, lo que es más importante, usen sus voces para fortalecer las exigencias de justicia y rendición de cuentas de los iraníes.
La muerte trágica de Mahsa Zhina Amini —una mujer kurda de 22 años que perdió la vida bajo la custodia de la policía moral— ha provocado uno de los mayores movimientos de derechos civiles en la historia reciente del país, con las mujeres iraníes a la cabeza. Se han producido protestas por todo Irán durante 20 semanas. Ahora, este movimiento ya no es una serie de manifestaciones, es una revolución. Mientras los iraníes siguen arriesgando y perdiendo la vida por la libertad, un pequeño grupo de primera y segunda generación en la diáspora se unió para diseñar estrategias para apoyarlos y crear conciencia en todo el mundo. Analizaron cómo podrían compartir y amplificar las historias y las experiencias de sus seres queridos en Irán sin poner en peligro su seguridad. Poco a poco, este grupo pequeño fue creciendo hasta convertirse en el Iranian Diaspora Collective (IDC), un grupo multirreligioso no partidista con miembros de diferentes orígenes, géneros, sexualidades, identidades e industrias.
La mayoría de los miembros han mantenido sus identidades en el anonimato para evitar posibles represalias a sus seres queridos en Irán. Sin embargo, el trabajo del IDC se está volviendo cada vez más visible. Además de trabajar en estrecha colaboración con la prensa para mantener a las personas en Irán siempre presentes en las mentes y los corazones, el colectivo recaudó fondos a través de una campaña de GoFundMe para publicar grandes anuncios por todo Los Ángeles, Nueva York y Washington D. C., con vallas publicitarias, publicaciones sugestivas y anuncios digitales que llegaron a más de 20 millones de personas.
El objetivo de los anuncios era doble: aumentar la visibilidad de la situación en Irán y levantar la moral de los iraníes. El IDC colaboró con artistas anónimos en Irán para producir los materiales gráficos e hizo los anuncios bilingües, ya que su público no solo era gente en los EE. UU. sino también en Irán.
Aún no se ha revelado qué sigue para el IDC, un colectivo que no está asociado con ningún otro grupo político ni de cabildeo. Sin embargo, tal vez lo único que necesitamos saber es que el objetivo común de la unidad diaspórica es «apoyar el derecho de los iraníes a un Irán libre y equitativo».
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Roya Shariat es una escritora y líder de impacto social radicada en Brooklyn, y autora de Consumed, una newsletter sobre cultura y comida.
