El test del clítoris: una medida feminista del placer femenino
Han pasado más de dos años desde que Frances Rayner fundó la campaña The Clit Test, una prueba conocida como el test de Bechdel para las escenas de sexo, que involucra el reconocimiento de la existencia del clítoris y su importancia en un programa de televisión o una película. «La idea de que el sexo significa un pene que entra en una vagina es anticuada y su final se siente cerca», comenta Rayner.
Empeñada en ver escenas de sexo reales en la pantalla, Rayner —una comunicadora de organizaciones benéficas radicada en Glasgow, Escocia— ha quedado realmente «impresionada» por la respuesta de la gente. «Cuando envié por primera vez un comunicado de prensa sobre el test del clítoris, no tenía idea de cuánto interés generaría, pero desde entonces se ha presentado en 14 países y en varios medios importantes», dice. «Ha tenido un gran apoyo de sexólogos, directores, creativos, actores y coordinadores de intimidad en el set».
Mi objetivo era amplificar el buen trabajo que los creadores estaban realizando y presentarlo como un ejemplo de lo que significa el buen sexo en pantalla. Creo que lo he logrado en gran medida. No sé si haya sido un efecto de la campaña o no, pero me alegra decir que, en los últimos seis meses, no he visto muchas escenas de sexo en las que participen personas con vulvas que no contengan al menos un poco de acción en el clítoris».
Entonces, ¿cuáles son las películas y los programas de televisión recientes que ocupan los primeros lugares? Rayner nos habla de ellos:
1. Bridgerton «Creo que es un tema que realmente se normalizó», dice Rayner sobre las escenas de sexo en la primera temporada de Bridgerton, el éxito de Shonda Rhimes producido por Netflix. «Había muchas escenas con cunnilingus y manos involucradas. Y eso es algo realmente agradable de ver, con ese toque atrevido que caracteriza este tipo de escenas. Por supuesto que no se trata solo de la penetración».
Sin embargo, no todo es perfecto. «El único defecto que le encuentro al programa es la escena en la que Daphne [interpretada por Phoebe Dynevor] engaña a su marido Simon [interpretado por Regé-Jean Page] para concebir —o intentar concebir— un bebé», explica Rayner. «Y él le pidió que dejara de hacerlo, pero ella no lo hizo. Sentí que eso no se tomó lo suficientemente en serio en el guion. Mucha gente reclamó eso». 2. Annette «Es como una verdadera obra de arte», dice Rayner sobre la película Annette de 2021. «Lo más sorprendente de todo —y esto es algo que se discutió mucho en ese momento— es que solo hay tres escenas de sexo [en la película]. Los protagonistas son Adam Driver y Marion Cotillard, y hay sexo oral en las dos primeras, por lo que ves tanto de eso como de sexo con penetración. Se siente una especie de equilibrio, no como si el sexo oral fuera algo “extra”. Es tan importante para la mujer como lo es la penetración para el hombre». 3. The Souvenir: Part II «¡El sexo en esta película me hizo sentir tan feliz!» comenta Rayner sobre la segunda entrega de The Souvenir, protagonizada por el dúo de madre e hija Tilda Swinton y Honor Swinton Byrne. «En una escena, hay un encuentro rápido y lujurioso. Es con alguien con quien ella [el personaje de Swinton Byrne] no debería tener sexo. Y encima ella tiene la regla. Y él le da sexo oral. Para mí, eso tiene un impacto doble. Y no es porque él diga como “te amo tanto, así que estoy dispuesto a hacerlo”. Es más bien como, “sí, estamos teniendo sexo, así que si te estoy penetrando, tú querrás algo que sea el equivalente, algo que involucre al clítoris”». En 2022, Rayner está dejando que la campaña siga su curso natural. «Aunque creo que la revolución del clítoris está realmente en marcha, todavía queda mucho trabajo por hacer para mejorar nuestras convenciones sobre el sexo de otras maneras», afirma. «Rara vez vemos personajes trans teniendo sexo agradable en la pantalla, aunque Sense8 es una gran excepción a la regla. Y estamos lejos de ver buenos modelos de consentimiento». Con suerte, todo eso está por venir. Susan Devaney es una periodista y editora independiente que ha trabajado para publicaciones como British Vogue y la revista Stylist. También ha escrito para Refinery29 UK, ELLE y The Guardian, entre otros.
